RESEÑA: Proyecto Power

 

Título original: Project Power

Año: 2020

Director: Henry Joost

Elenco: Jamie Foxx, Joseph Gordon-Levitt, Dominique Fishback, Rodrigo Santoro, Colson Baker, Allen Maldonado, Amy Landecker, Courtney B. Vance

Producción: Eric Newman, Bryan Unkeless

Guión: Mattson Tomlin

Género: Acción, ciencia ficción, superhéroes

El mes pasado se estrenó una de las más recientes producciones de Netflix, Proyecto Power, con la cual es posible que pasen entretenidos al menos para pasar el tiempo. A continuación daré la sinopsis de la película, por lo que habrá una ALERTA DE (posibles) SPOILERS, ya que la película se estrenó hace bastante tiempo (poco más de un mes en lo que se escribe esto). 

En Proyecto Power hay una venta clandestina en Nuevo Orleans de unas píldoras que le otorgan poderes a quienes las ingieren. Dichas píldoras están basadas en habilidades e instintos de animales para defenderse, por lo que les son muy útiles a criminales y otra gente del bajo mundo. Art (Jamie Foxx) es un hombre que está en busca del origen de la distribución de las píldoras Power, mientras que por otro lado, están Frank Shaver (Joseph Gordon-Levitt), un oficial del Departamento de Policía de Nuevo Orleans, quien ocasionalmente trabaja con una adolescente, Robin (Dominique Fishback), trabajando precisamente para capturar a algunos jóvenes que buscan píldoras y confiscarlas. Robin, quien es aspirante a rapera, se une en un determinado momento a Art en su búsqueda del origen de las píldoras. Sin embargo, a Frank le ordenaron capturar a Art por ser un sospechoso en la distribución del Power.

Proyecto Power no es una gran película, pero es palomera. En la actual era del cine de superhéroes, trata de mostrar algo diferente, fuera de lo tradicional del subgénero (Superman, Batman, Spider-Man, Avengers, etc.), y se encamina por el mismo lado que otros films como Jumper (Doug Liman, 2008) y Héroes (Paul McGuigan, 2009), películas poco exitosas, pero que si bien tienen de tema central a gente con habilidades sobrehumanas, se enfocan más en la acción que en hacerla ver como "una película de superhéroes".

El desarrollo de los personajes es bueno (por lo menos con los protagonistas), aunque en ocasiones puedan parecer estereotipos andantes, y me refiero específicamente al personaje de Robin, quien es una chica negra aficionada al rap y al basquetbol, aunque por lo menos esa parte del rap termina estructurando parte de la trama y por ello "se justifica", por decirlo de una manera; el desarrollo de Art es un poco mejor, en su búsqueda del origen de las píldoras Power hay algo más de fondo; Frank no está tan desarrollado como los otros dos personajes, pero de igual manera es importante para la trama.

De repente hay comicidad, y aunque no es muy jocosa, tampoco se siente forzada. En cuanto a los efectos visuales no se le puede reprochar mucho. El guión no es uno de los mejores, pero eso sí, personalmente, me gustó mucho la idea de que las píldoras se basaran en las habilidades y mecanismos de defensa de los animales.

Le doy un 6.5/10

Como ya mencioné, es una película palomera, de la cual no se pierde nada si la ves o no la ves, es posible que te entretenga al menos si te gustan las películas de acción y de superhéroes.